Familia POOL BAKER

Familia POOL BAKER




                  Desde Inglaterra, de las suaves, hermosas y verdes colinas de Brendon Hills, llega el iniciador de esta antigua familia taltalina.

            El Dr. José Pool Gilbert nació el año 1872, sus padre fueron los ciudadanos ingleses don Aníbal Pool y la dama doña Felipa Gilbert, viaja con su familia a Chile cuando tenía seis años de edad, llega a Chañaral en 1879, pueblo bullente de actividad por la guerra del Pacífico.

A la par de que se va incrementando el conocimiento y el amor a esta nueva tierra, realiza sus primeros estudios en un colegio particular, perteneciente a la parroquia de la comunidad anglicana, y dirigida por el pastor protestante señor Juan Robertson, hasta los 15 años, regresando a Inglaterra el año 1887 para continuar su educación. Ingresa al Instituto Penzance, establecimiento en que cursa sus estudios de humanidades, para posteriormente dirigirse a la importante ciudad de Piymount, después de brillantes exámenes recibe su título de bachiller y desde allí se dirige a Londres ingresando al "Dental Hospital", obtiene su título de Cirujano-Dentista el año 1892. Revalidando su título en la Universidad de Chile.

Enamorado de esta tierra regresa el mismo año a Chile, ejerciendo en la capital un poco tiempo, para dirigirse a Tocopilla y finalmente se radica definitivamente, el año 1893 en Taltal.

En esta ciudad se distinguió tanto en el plano profesional, como social, participando siempre en actividades de adelanto y desarrollo, lo que lo hace acreedor a la gratitud de los ciudadanos por su caballerosidad y obras de bien público, se caracterizó porque siempre atendió gratuitamente a los más pobres.

Realizó su actividad profesional atendiendo al personal y familiares de FFCC de la empresa inglesa, de las salitreras y del puerto, haciendo visitas profesionales periódicas a las oficinas Santa Luisa, Chile y Alemania. Hasta el año 1949 atendió a los beneficiarios de la Caja del Seguro Obrero y desde ese año hasta poco antes de su muerte atendió en el Hospital 21 de Mayo.

El Dr. José Pool se desposó con la dama inglesa Bessie Pool, quien fallece dejando una hija María Pool Pool. Después de un tiempo de viudez se desposa con la dama taltalina doña Rosa Úbeda. De este matrimonio nacen cinco hijos: José, Aníbal, Felipe, Eduardo y Zunilda. La mayoría de sus hijos emigra de Taltal y fallecen relativamente jóvenes, sobreviviendo solamente Felipe Pool Úbeda, que permaneció al lado de su padre hasta su muerte y siguió residiendo en esta tierra hasta que le llegó también el momento de partir de este mundo. En Taltal Felipe se dedica a diferentes actividades.

El Dr. Pool falleció a la edad de 82 años, el 14 de Febrero de 1954, con una lucidez envidiable y rodeado de la gente a quien tanto sirvió y amo.

Don Felipe Pool Úbeda se casa en Taltal con la dama taltalina doña Juana Baker Correa, de este matrimonio nacen cinco hijos: Rosa, Daysi, Eduardo, Juan y Aníbal. Todos ellos se desempeñaron en diferentes actividades y profesiones, destacándose especialmente en el plano deportivo representando a la ciudad en varias oportunidades. Juan además de ser un destacado basquetbolista, heredando el espíritu de servicio de su abuelo, es bombero activo de la 3a. Compañía desde hace más de 25 años. Rosa, Daysi y Eduardo, con sus respectivas familias residen en otras ciudades.

En Taltal residen actualmente, enraizados a esta tierra que tanto amó su abuelo inglés, Juan, de profesión Laboratorista Dental, casado con la Sra. Marlinda Gallo, profesora, también hija de una distinguida y antigua familia taltalina. Los acompañan sus dos hijos: Evelyn, de profesión Educadora de Párvulos y Juan José, Arquitecto quienes siguiendo la tradición familiar se desempeñan profesionalmente en Taltal, contribuyendo con su trabajo a engrandecerlo. El otro nieto del Dr. Pool que no abandona su terruño es Aníbal, industrial minero, viudo de la Sra María Tófalos, igualmente como él, hija de una de las más antiguas familias de Taltal, con sus hijos: Marjory, Eduardo y Tracy

Todos ellos orgullosos del primer Pool que pisó tierra chilena, hace más de un siglo en plena Guerra del Pacífico, desde la lejana Inglaterra.